Los aportes que la educación musical es capaz de generar durante los aprendizajes en la infancia y en la formación pedagógica de los futuros educadores, mediante el análisis de obras, composiciones propias y dinámicas asociadas a la producción sonora, fueron algunos de los temas que abordó la profesora y directora del Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), Laia Viladot, durante una jornada taller que organizaron en conjunto las escuelas de Educación Parvularia y de Pedagogía en Música de la Universidad de Valparaíso.

La actividad, que congregó a casi un centenar de estudiantes y docentes de ambos planteles, tuvo lugar en el Campus de la Salud UV de Reñaca y en ella también participó el docente de la UAB e investigador principal del Grupo de investigación en Música, Voz y Educación de Cataluña (España), Albert Casals.

En la ocasión, la vicedecana de la Facultad de Humanidades y Educación, Ángela Vallejos, destacó la importancia de promover espacios de interacción trans e interdisciplinarios que fomenten el desarrollo de competencias y habilidades en diferentes dimensiones. Sus palabras fueron complementadas por las docentes Patricia Herrera y Gudrun Marholz, de la Escuela de Educación Parvularia, quienes valoraron de gran manera la posibilidad de intercambiar saberes y compartir experiencias en estos ámbitos con los dos académicos de la UAB invitados.

La presentación de Laia Viladot combinó ejercicios y bailes en aula con reflexiones teóricas acerca de la audición, la interpretación y la creación musical, como parte de una didáctica en que la creatividad y lo conceptual, incluso la palabra, se unen al movimiento como expresión plástica y corpórea que contribuye a dar sentido lo sonoro.

“El movimiento ayuda a escuchar una melodía, a veces por gusto o placer, a veces de manera más libre o sin mayor sentido aparente. Es decir,  no siempre lo musical tiene que ver con contenido. Por ejemplo, en la etapa infantil, el movimiento es una guía en la exploración sensorial. Y esto es importante que se comprenda y se incorpore en la formación pedagógica de los futuros educadores”, argumentó la directora del Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal de la Universidad Autónoma de Barcelona.
  
Por su parte, Albert Casals, quien se dedica a investigar sobre la importancia de incluir la música en la educación obligatoria, abordó algunos aspectos asociados a las canciones con versos improvisados, bajo una perspectiva más amplia de los procesos de enseñanza y aprendizaje, así como también al discurso en aula como herramienta para el progreso y la apropiación de contenido.

Ambos concluyeron que trabajar a partir de esta metodología favorece la comprensión de los procesos de enseñanza y aprendizaje de la música —en particular en situaciones de innovación didáctica—, a la vez que aporta a la fundamentación teórica y promueve la mejora de la praxis educativa.